El CESLA presentó recomendaciones para incluir Población en Condición de Discapacidad (PCD) en el mercado laboral
Cartagena, 14 de noviembre de 2019. El Presidente de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI), Bruce Mac Master, y el Director de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para Colombia, Ítalo Cardona, estuvieron a cargo de la instalación del Primer Encuentro Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo, que se lleva a cabo en Cartagena. Este fue el espacio para presentar los resultados de la V Encuesta de Ausentismo Laboral e Incapacidades elaborada por el Centro de Estudios Sociales y Laborales (CESLA) de la ANDI.
“En la ANDI hacemos este tipo de encuentros para dar una mirada integral y científica a los asuntos laborales para que se analice desde lo técnico cuál es la situación actual y cómo podemos adaptarnos a las nuevas realidades del trabajo para ser más productivos y hacerle la vida más fácil a los empleados y a los empleadores, entendiendo que cuando a las empresas les va bien, esto debe traducirse en mayor bienestar para los trabajadores, las comunidades y la población. Por eso es importante desarrollar la capacidad de encontrarnos y construir ecosistemas que permitan compartir conocimiento, pero también trazar propósitos comunes”, aseguró Bruce Mac Master durante la instalación.
Las conclusiones del estudio fueron presentadas por Mac Master quien explicó que la Encuesta fue aplicada a 139 empresas, con una nómina de $13,6 billones, que representan 16% del PIB ($157 billones en ingresos operacionales) y que suman 341.843 trabajadores. Allí se detectó que en 2018 se presentaron 1,59 casos de ausentismo laboral por cada trabajador, mostrando un incremento frente a los 1,40 casos que se registraron en 2017. Así mismo, los días de ausentismo laboral por trabajador pasaron de 8,9 en 2017 a 9,1 en 2018; y la mayoría (55,3%) de las incapacidades por enfermedad general duraron entre uno y dos días. La Encuesta también demostró que los costos asociados al ausentismo laboral pueden llegar a ser 2,30% del salario de un trabajador.
Respecto a las restricciones médicas y las reubicaciones se encontró que, por cada 1.000 trabajadores, 36 tienen alguna restricción médica y 8,5 han sido reubicados. Igualmente, el número de solicitudes ante el Ministerio del Trabajo de terminación de contrato a trabajadores con fuero de salud en 2018 ascendió a 1.621, mientras que, en 2017, este indicador era de 1.560. Entre enero y julio de este año, además, el número se ubicó en 1.242.
En ese sentido se concluyó que en promedio una empresa, por cada 1.000 trabajadores, tiene 1.590 casos de ausentismo laboral; 9.100 días perdidos por incapacidad y 36 trabajadores con restricción médica. Así mismo, los costos de ausentismo en promedio ascienden a $535 millones y los de restricciones médicas y reubicaciones laborales a $177 millones.
En este mismo marco, el Director de la OIT para Colombia, Ítalo Cardona, aseguró que vale la pena seguir evaluando si la salud y la seguridad deben ser parte del corazón normativo de la OIT y reiteró el compromiso de la Organización en seguir acompañando a gobiernos y empresas en hacer reflexiones prácticas y constructivas que no solo permitan mantener un buen desempeño económico de la industria, sino también un entorno con mejores condiciones para empleadores y empleados. Cardona destacó la invitación que se ha hecho desde la ANDI para evaluar los principales asuntos laborales a partir del diálogo social.
Durante la primera jornada también fue presentado el Plan de acción para gerenciar el ausentismo laboral con el que el CESLA propone una ruta de seis pasos:
El CESLA igualmente presentó cifras sobre inclusión de Población Con Discapacidad (PCD) en el mercado laboral. Mostró que 7,1% de la población colombiana tiene alguna condición de discapacidad y que 57% de ellos está en capacidad de trabajar. Además, informó que cuatro de cada 100 PCD tienen un nivel educativo superior (técnico, tecnólogo, universitario).
En ese sentido, el CESLA aseguró que incluir PCD en las nóminas representa a las empresas beneficios tributarios, mayor productividad para esta población, menor ausentismo, mejor clima laboral y mayor reputación. Así mismo, aseguro que las claves para una inclusión efectiva son: tener un cambio de mentalidad; tomar una decisión de empresa; elaborar una política de inclusión; analizar y seleccionar el personal; hacer ajustes razonables y adaptaciones de la empresa; hacer contratación y seguimiento; y capacitar y sensibilizar.