En 26 años de trabajo en iniciativas comunes y transversales nos hemos consolidado como el gremio farmacéutico de mayor representatividad.
Por: Ana María Vesga Gaviria, Directora Ejecutiva de la Cámra Farmacéutica
La industria farmacéutica es un actor presente en todas las conversaciones del sistema de salud. No solamente porque los medicamentos representan cerca del 20% del gasto en salud en el país, sino por su aporte a la salud y el bienestar de los pacientes.
En el contexto de un país que registra un gasto en salud bajo con relación a los países OCDE y que tiene un gran reto de cobertura universal, el acceso a los medicamentos, con calidad, seguridad y a precios sostenibles, es uno de los mayores desafíos.
La Cámara Farmacéutica de la ANDI agrupa 63 laboratorios productores de medicamentos y suplementos dietarios, nacionales y multinacionales, cuyas ventas representan el 80% de las ventas totales de medicamentos en el país.
Con 26 años de historia, la Cámara se consolida como el gremio farmacéutico de mayor representatividad y trabaja en iniciativas que son comunes y transversales a todos los laboratorios afiliados.
La coherencia regulatoria con miras a la racionalización y modernización de los trámites, la transparencia en todas las relaciones de la industria y el avance hacia la autorregulación, así como el acceso a los medicamentos, hacen parte de nuestra agenda.
La construcción de una política industrial farmacéutica ha sido también uno de los ejes principales de nuestros grupos de trabajo. Sensibilizar al Gobierno acerca del impacto que este sector puede generar en la competitividad del país atrayendo y estimulando inversión, y generando empleos de calidad es uno de nuestros mayores objetivos, y podemos decir que vamos en la dirección correcta.
De igual manera, la formulación de una política nacional de autocuidado, concepto entendido y afianzado hoy en muchos sistemas de salud del mundo y que nos habla de la corresponsabilidad de la población en la autogestión de su salud, hace parte de nuestro plan de trabajo. Los sistemas de salud deben evolucionar de la atención a la enfermedad a la prevención de la misma. Esto los hace sostenibles, pero requiere ciudadanos informados, con hábitos de vida saludables que sepan detectar señales tempranas de enfermedad y que puedan gestionarlas correcta y responsablemente.
Colombia afronta, como muchos países del mundo, el envejecimiento de su población y la carga de la enfermedad hoy se concentra en enfermedades crónicas y costosas, que pueden ser prevenidas en gran medida con buenos hábitos. Los laboratorios farmacéuticos, de manera individual y en conjunto –a través del Gremio–, estamos trabajando en la construcción de la política de autocuidado que vincule a todos los agentes, articule las acciones con miras a ese objetivo y contribuya a la sostenibilidad del sistema.
Desde la Cámara hemos promovido el trabajo conjunto con todos los actores. No somos agentes aislados; necesitamos cooperación, confianza y, sobre todo, corresponsabilidad. Ese mensaje fue el eje de los diálogos durante el Foro de la Salud 2018 #HechosDeConfianza y seguiremos trabajando en esa dirección, conscientes de la responsabilidad que tenemos con los pacientes y con el sistema de salud en Colombia.