15 de septiembre de 2021. El helio es un gas empleado en diversas aplicaciones en la industria y la medicina y, al ser inerte y más liviano que el aire, es utilizado para hacer flotar los globos sin generar peligro de explosión, quemaduras o toxicidad. Lastimosamente, en Colombia es común el uso de hidrógeno de fabricación casera para este fin, el cual es más económico y fácil de obtener, pero es un gas altamente inflamable.

Según Ingrid Marcela Reyes Rey, directora de la Cámara de Gases Industriales y Medicinales de la ANDI, “el hidrógeno artesanal se produce sin condiciones de seguridad, por mezcla química al interior de cilindros que son sustraídos indebidamente del mercado, generalmente en mal estado o no aptos para su circulación, para comercializarlos a un precio menor en las calles, piñaterías y otros establecimientos, como gas para el inflado de globos. A diferencia del helio, el hidrógeno es altamente inflamable, por lo que su manipulación, tanto de quien lo fabrica de manera casera, como de quien lo resulta usando en una fiesta o evento, representa un alto riesgo de explosiones, quemaduras e incluso, la muerte”.

Es así como las empresas productoras y comercializadoras de gases industriales y medicinales, agremiadas en la Asociación Nacional de Empresarios (ANDI), en la campaña que han venido adelantando llamada #NoTeEXponGAS, reiteran el llamado a los comerciantes y a la comunidad a evitar la manipulación indebida de cilindros de gas, a utilizar helio para el inflado de globos que flotan, a adquirirlo de establecimientos legalmente constituidos, exigiendo el respectivo certificado del gas, y a denunciar ante Bomberos y la Superintendencia de Industria y Comercio, Delegatura para la Protección del Consumidor, todo hecho sospechoso observado.

De esta manera se aporta a la protección de la vida y seguridad, especialmente de la población infantil, y se da cumplimiento a la Resolución No. 53026 de 2015 impartida por la SIC, que ordena utilizar estrictamente aire o helio para el inflado de globos y abstenerse de usar hidrógeno, con el fin de evitar sanciones de tipo administrativo, e incluso penal, y riesgos para la salud pública.