Bogotá, 15 de octubre de 2021. Hoy se celebra el Día Mundial del Lavado de Manos, una fecha que nos recuerda esta acción de autocuidado para prevenir enfermedades. La Cámara Farmacéutica de la ANDI hace un llamado de la importancia de este hábito para el cuidado de la salud.

Según el DANE, la primera causa de muerte natural se encuentra en las enfermedades infecciosas y parasitarias, grupo en donde se clasifican las defunciones por COVID-19. Esta causa de muerte naturalrepresenta: 29,2% en mujeres y 38,1% en hombres. En segundo lugar, están las enfermedades isquémicas del corazón, y en tercer lugar las enfermedades cerebrovasculares.

Existe evidencia clínica suficiente para probar que el lavado de manos reduce la transmisión de microorganismos y la incidencia de infecciones. En efecto, la Organización Mundial de la Salud – OMS, indica que una eficaz higiene de manos es lo más relevante que tanto una persona común como el trabajador en salud pueden hacer para prevenir una infección que podría causar daño y hasta derivar en la muerte.

“Es una buena oportunidad para recordar la importancia que tiene este hábito en el cuidado de nuestra salud, lavarnos las manos reduce las enfermedades respiratorias y de la piel; y también contribuye a reducir los riesgos de contagiarse del virus del Covid. Por eso, lavarnos las manos es cuidar nuestra salud”, comenta Ana María Vesga, Directora de la Cámara Farmacéutica de la ANDI.

Las consecuencias de la ausencia o inadecuada higiene de manos son bastante graves, pues según la Organización Mundial de la Salud, uno de cada diez enfermos hospitalizados sufre alguna forma de daño evitable que puede provocar discapacidades o incluso la muerte. A esto se suman las repercusiones económicas que representan en algunos países un costo anual de entre 6.000 y 29.000 millones de dólares.

Los menores de edad son los más susceptibles a padecer afecciones de salud por la falta de una adecuada higiene de las manos. Según la Organización Panamericana de la Salud, cada año más de 3,5 millones de niños y niñas no llegan a celebrar su quinto aniversario de vida debido a diarrea y/o enfermedad respiratoria.

Corresponde también a los ciudadanos asumir un adecuado comportamiento y autocuidado porque a partir de los buenos hábitos cotidianos se protege la vida de muchos.