Por: Alberto Vives de la Espriella, Gerente de la Seccional Atlántico - Magdalena

El 16 de mayo de 1945 se reunió en Barranquilla la 1.ª Asamblea General de Afiliados de la ANDI, dando origen a la Seccional de esta ciudad solo un año después de haber nacido la sede principal de la ANDI en Medellín.

La Seccional surgió por la necesidad de tener un organismo representativo y orientado, con el propósito de fomentar el desarrollo industrial y a la vez “difundir y mantener los principios políticos, económicos y sociales de un sano sistema de libre empresa”. Hoy tiene un cubrimiento que abarca toda la zona nororiental de la costa Caribe, desde el Atlántico hasta La Guajira.

Nuestra función está basada en propiciar escenarios que beneficien el desarrollo del sector empresarial, mejorando la competitividad y estimulando el crecimiento económico. Esto es posible gracias al permanente relacionamiento con entidades del orden nacional, regional y local.

Dentro de los asuntos de trabajo diario de esta Seccional tenemos los energéticos y los de sostenibilidad, innovación, emprendimiento y transformación digital, eficiencia logística, infraestructura para la competitividad y arquitectura social, entre otros, pues los consideramos fundamentales para la integralidad del tejido empresarial que está estrechamente relacionado con el cumplimiento de los objetivos estratégicos, apuntando a generar productividad y competitividad.

Desde nuestra seccional visualizamos un Atlántico competitivo. Nuestra posición geográfica nos permite tener grandes ventajas en materia energética y de comercio internacional y nacional. Adicionalmente, nuestra diversidad en sectores económicos facilita una dinamización de la economía regional.

La industria energética se perfila como uno de los grandes potenciales del Caribe, tanto con energías renovables no convencionales, como en materia de offshore y no convencionales de petróleo y gas. Por esta razón trabajamos activamente con el sector público para viabilizar el desarrollo de estas industrias, que sin lugar a dudas generan seguridad energética, un elemento vital para la sostenibilidad empresarial.

Nuestros retos como Seccional apuntan a ser motor de desarrollo y a generar y acelerar entornos y condiciones favorables potencializando el tejido empresarial, atrayendo inversión y generando un crecimiento sostenible. Por ello estamos atentos a trabajar de manera conjunta con nuestras empresas afiliadas y demás actores, para construir de forma constante herramientas para que logren alcanzar sus objetivos, con el convencimiento que el sector empresarial ejerce un rol contundente en la región.