martes, 26 de noviembre 2024 | English | INICIAR SESIÓN
junio 3 de 2022
La industria de alimentos se pronuncia frente al etiquetado nutricional frontal en Colombia

La Industria de Alimentos de la ANDI, por supuesto como actor fundamental del sector, ha sido parte del debate exponiendo sus posiciones en forma transparente y está lista para cumplir en todo momento con la normatividad vigente frente a este tema.

Bogotá, junio de 2022. Después de un debate técnico que tomó más de 2 años y que liderado por el Gobierno Nacional, involucró las opiniones de academia, entidades de la sociedad civil, la comunidad médica y la industria, hoy es posible -a 10 meses de la aprobación de la Ley 2120 y a 11 meses de la expedición de la Resolución 810- ver referencias del etiquetado frontal en Colombia con los correspondientes sellos circulares que indican los niveles altos en sal/sodio y grasas saturadas.

El trabajo que se ha adelantado hasta el momento gira en torno al consumidor puesto que la ley dispone que la información debe ser clara, veraz, oportuna, visible y suficiente, y hoy con la Ley 2120 de Entornos Saludables y la Resolución 810 y sus sellos de advertencia circulares, la ampliación de la tabla nutricional, el sello positivo y la actualización de las declaraciones nutricionales, Colombia cuenta con el marco normativo más actualizado de la región. En el mundo se ha implementado el etiquetado frontal con diversos modelos gráficos, colores, limites, tamaños y formas y el Gobierno Nacional escogió aquel que responde al perfil del consumidor colombiano.

Cabe recordar que desde 2016 la industria de alimentos en Colombia había implementado mediante acuerdo de autorregulación sectorial, el etiquetado frontal informativo con el modelo de Cantidades Diarias Informativas (GDA por sus siglas en inglés), adoptado en más de 55 países del mundo. Este fue el modelo la que la Cámara de la Industria de Alimentos de la ANDI presentó como propuesta de regulación al Gobierno Nacional en las mesas de trabajo y consultas públicas, sin embargo no fue aceptada por el Ministerio de Salud debido al propósito de avanzar hacia el etiquetado frontal de advertencia como herramienta para entregar la información al consumidor Colombiano.

En la construcción de la Resolución 810, el Ministerio de Salud permitió la participación de toda la ciudadanía y el acto administrativo surtió los pasos requeridos para su emisión. En 2019 formuló el Análisis de Impacto Normativo. En 2020 realizó las consulta públicas nacionales donde analizaron 2.444 comentarios que presentaron 102 personas jurídicas y 11 personas naturales. En 2021 realizó la consulta pública internacional en la que respondieron a 1.346 observaciones y finalizó el Gobierno Nacional con el concepto favorable de abogacía de la competencia por la Superintendencia de Industria y Comercio y del Departamento Administrativo de Función Pública. La Resolución 810 fue emitida el 16 de junio de 2021 y otorga 18 meses de transición hasta el 16 de diciembre de 2022.

El nuevo esquema del etiquetado nutricional hoy es el fruto de un profundo debate, donde todas las partes presentaron sus argumentos técnicos para contribuir a la toma de decisiones para que este etiquetado sea una realidad. La Cámara de la Industria de Alimentos de la ANDI seguirá trabajando para apoyar los avances en políticas públicas de salud.

“La industria en Colombia avanza en el monumental trabajo que implica este importante cambio en la forma cómo se producen, empacan y comercializan alimentos establidos en la Resolución 810. Bajo este panorama esperamos contribuir a que los colombianos accedan a la mejor información a la hora de comprar alimentos y así avanzar en la adopción de hábitos de vida saludable. Este es un reto que asumimos con entusiasmo y para poder cumplir para la fecha límite, ya se empieza a ver en productos en las góndolas y puntos de venta del país”, afirmó Camilo Montes, Director Ejecutivo de la Cámara de Alimentos de la ANDI.

Para garantizar el derecho a la salud es un imperante promover entornos saludables y en este sentido, la lucha contra las enfermedades no transmisibles (ENT) caracterizadas por ser multifactoriales, debe incluir lineamientos de trabajo conjunto. Por eso desde la industria estamos convencidos de que el complemento entre una actividad física constante, con una alimentación balanceada y variada, ingerida en las proporciones adecuadas es fundamental para generar un verdadero impacto sobre el manejo de las mismas. Por supuesto, en este camino la medida del etiquetado frontal es un aporte importante al entregar información clara y oportuna.

Frente al anuncio del Ministerio de Salud de la contratación de la Universidad de Antioquia para que estudie la mayor evidencia científica disponible y libre de conflicto de intereses y, de acuerdo a las conclusiones, avanzar con la regulación de la Ley 2120; la Cámara de la Industria de Alimentos espera que el Departamento de Nutrición y Dietética de la UdeA tenga en consideración todos los estudios que sobre la materia se han por diversos centros de investigación académicos de tal forma que sus conclusiones no tengan ningún sesgo.

“Sin duda alguna, abordar los desafíos de salud pública en Colombia exige la toma de decisiones articuladas para lograr cambios significativos en los hábitos de consumo alimentario. Por eso creemos en el valor del trabajo conjunto para mitigar los riesgos en salud que afronta Colombia y pedimos que ningún alimento sea estigmatizado puesto que la creación de nuevas alternativas de consumo surge desde la ciencia y tecnología de los alimentos. Nuestro compromiso es mantener la entrega de la mejor información para que el consumidor pueda seleccionar los productos de manera clara y transparente, comprendiendo mejor su contenido nutricional” concluyó Montes.

 

Algunas referencias de etiquetado frontal que ya se encuentran en el marcado: