El documento permite reconocer los cambios generados y profundizar en el detalle de las dinámicas vividas por los trabajadores en el marco del aislamiento preventivo obligatorio.
Bogotá, 15 de septiembre de 2020. La Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI) y el Ministerio del Trabajo presentaron los resultados de la Encuesta de Conciliación de Vida Laboral y Personal, en la cual participó una muestra de 8.670 personas de 277 empresas (42% de la industria manufacturera, 15% del sector de información y comunicaciones y 11% de comercio), principalmente de Bogotá (40%), Antioquia (25,2%) y Valle del Cauca (10%).
Para el Presidente de la ANDI, Bruce Mac Master, “Este es un trabajo estadístico que permitió levantar información muy valiosa para ver cuáles son las mejores formas para atender esas necesidades de conciliación entre la vida laboral y la personal. La intención es brindar elementos de juicio para tomar decisiones como individuos, como compañías, como Estado y como sociedad. Además, por años hemos tenido una brecha importante de género en términos de acceso a cargos y a cargos directivos, remuneración y participación en organismos de alta dirección. Hay una brecha mucho mayor en la gente que no trabaja.”.
Así mismo, el Ministro de Trabajo, Ángel Custodio Cabrera, aseguró que “la conciliación de la vida laboral y personal es de vital importancia para el Gobierno Nacional y para el país. En ese sentido, es fundamental entender qué está pasando con esa mezcla en el marco de la pandemia y con especial atención en el tema de equidad de género. Esta Encuesta nos permite visualizar esos cambios que se han generado para revisar como aportamos a la creación de una nueva forma de atender lo laboral con lo familiar, especialmente en las mujeres y las mujeres con jefatura de hogar”.
La presentación de los resultados también contó con un panel de debate en el que participaron los líderes empresariales: María del Rosario Gómez, Socia de la firma Duarte García y Abogados; Damaris Giraldo, Gerente de Gestión Humana de Grupo Nutresa; Ana Milena Londoño, Gerente de Gestión Humana de Belleza Express; y Rafael Carbonell Blanco, Gerente de Personas y Organización de ENEL.
Principales hallazgos:
El documento permite reconocer los múltiples cambios que se generaron en los hogares en el marco del aislamiento obligatorio que vivió el país desde el 20 de marzo a causa del COVID-19, cuando el Ministerio del Trabajo reconoció el trabajo remoto o trabajo en casa como uno de los principales instrumentos para continuar con las actividades económicas en el marco de la Emergencia Sanitaria que fue declarada en el país. Así mismo, esta información permite profundizar en el detalle de las dinámicas vividas por los trabajadores colombianos, teniendo en cuenta que una de las principales consecuencias adoptadas fue el traslado de las tareas laborales a los hogares, lo cual impactó su cotidianidad e implicó la conciliación de las mismas.
Lugar de trabajo y jornada laboral
La encuesta evidenció que, la pandemia ha tenido un impacto importante en las dinámicas laborales, siendo la casa el lugar principal de trabajo de los encuestados con un 86,7% de personas que han trabajado allí desde que inició el aislamiento. Así mismo, las jornadas laborales en el marco de la pandemia han sido en promedio mayores a 8 horas diarias, según 57,7% de los encuestados. En términos de género, 61% de las mujeres y 53,2% de los hombres han visto aumentadas sus jornadas de trabajo, respectivamente.
Uso de medios digitales
En el marco de la pandemia, los medios digitales se consolidaron como la principal herramienta laboral, la cual fue utilizada por más de 8 horas al día por 51,8% de los encuestados (57,5% mujeres y 45% hombres). Esto significó, a su vez, que el internet se ha convertido en un importante habilitante para garantizar la productividad del talento humano. Sin embargo, 44% de los encuestados manifestó tener problemas de mala calidad de internet, una evidencia que supone un gran reto para el país en materia de conectividad.
Actividades y sustento del hogar
La encuesta dejó ver que la convergencia de las actividades en el hogar con los asuntos laborales, familiares y personales ha representado un reto a la hora de encontrar un balance adecuado, armónico, y de establecer límites de tiempo entre ellas. En consecuencia, 36,8% de los encuestados aseguró que no estaba realizando actividades como atender citas médicas, tratamientos de cuidado, ejercitarse, meditar, hacer actividades espirituales, entre otras.
Así mismo, se encontró que los aportes para el sustento del hogar se hacen principalmente de manera compartida. Así, 41,9% de los hombres comparten responsabilidades del pago de los gastos del hogar, mientras que en las mujeres el porcentaje es de 59,1%. En cuanto a la responsabilidad individual de gastos, 56,9% de los hombres dijo tenerla, mientras que en el caso de las mujeres fue de 38,3%.
Actividades académicas y de formación
Aun cuando las jornadas laborales y las actividades domésticas aumentaron para todos los casos, las personas mantuvieron su interés en desarrollar actividades académicas y de formación, en comparación con el tiempo que venían destinando a esto antes del aislamiento. En ese sentido, el 69,9% de las personas manifestó realizar este tipo de actividades y, al revisar las cifras por género, el 73,8% de los hombres y el 65,7% de las mujeres aseguraron estarlo haciendo.
Ajuste de los ingresos y nuevas actividades económicas
La encuesta también reveló que 32% de los encuestados presentó una reducción en sus ingresos, mientras que el 46% aseguró que sus gastos aumentaron. Esto significó la búsqueda de otras actividades económicas en 17% de los encuestados. Allí se destacan el desarrollo de ventas de productos o alimentos por redes sociales y domicilio (71%), las ventas de servicios (8%) por redes sociales y a domicilio, y los emprendimientos familiares (6%).
Recomendaciones:
Como resultado de la encuesta y el trabajo adelantado por la alianza entre la ANDI y el Ministerio del Trabajo, para lograr el cambio esperado en el sector privado del país, aún resulta fundamental la capacitación del personal para la eliminación de los sesgos de género y la concientización de la urgencia de transformación en las organizaciones en favor de la equidad, la diversidad y la inclusión.
Igualmente, se demostró que la nueva realidad implica diseñar estrategias de medición constante que visibilicen las necesidades del talento humano en pro de su desarrollo personal y laboral. En ese sentido, también es importante que las entidades públicas continúen adaptando el marco regulatorio y generando acciones concretas que permitan a los ciudadanos, a los trabajadores y a las empresas (pequeñas, medianas y grandes) adaptarse a la nueva normalidad.
Finalmente, el estudio reafirma que el Estado, los empleadores y los trabajadores deben seguir estando articulados para impulsar la generación de políticas y programas que respondan a la nueva normalidad que, en esencia, es cambiante. Por esto, resulta fundamental, la continua medición de las realidades de los trabajadores del país para generar planes de acción informados, profundos y efectivos que permitan atender esas realidades.
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